Le ayudamos a crear un hogar cálido donde refugiarse de las frías noches de invierno.

Los sistemas de calefacción eléctrica aportan una serie de ventajas, entre las que destaca la comodidad y adaptación al estilo de vida existente en cada hogar.

Es confortable. Permite elegir la temperatura de cada habitación a gusto de cada usuario. La regulación independiente por habitación evita el sobrecalentamiento de algunas zonas de la casa con el consiguiente ahorro energético a la hora de la incómoda factura.

Las calefacciones eléctricas siempre están disponibles ante variaciones en los hábitos que puedan surgir en su casa, dado que utiliza la electricidad. Se puede programar y automatizar con gran sencillez y realizar cambios instantáneos según sus necesidades, es decir, siempre es usted el que decide.

Es limpia. No existe combustión, humos, residuos ni olores; no consume oxígeno y no enrarece el ambiente Su rendimiento es muy elevado, por lo que se aprovecha prácticamente toda la energía eléctrica que se consume. Es individual para cada vivienda o local.

En comunidades de propietarios, cada usuario es responsable de su propio consumo de forma exclusiva. Tiene muy poco o nulo mantenimiento y no exige instalaciones complicadas ni espacios dedicados a las mismas, tales como sala de calderas, depósito de combustible, chimeneas, etc. Es segura, una instalación eléctrica correctamente diseñada garantiza la seguridad de uso de la calefacción y su correcto funcionamiento, al igual que sucede con otros aparatos eléctricos.